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Biografía de Christina Koch, astronauta americana, junto con Jessica Meir, realizó una histórica caminata espacial, en el exterior de la Estación Espacial Internacional, en octubre de 2019.
Interés de la biografía de Christina Koch
Una sólida formación científica junto con su inteligencia privilegiada y un valor físico notable hicieron de Christina Koch la candidata especial para esta misión.
A las 14:00 (hora de España) del mediodía del 18 de octubre de 2019, Christina Koch y Jessica Meir protagonizaron el hecho de ser el primer equipo exclusivamente femenino que realizó una misión en el exterior de la Estación Espacial Internacional (ISS).
Estas dos astronautas salieron al exterior de la Estación, para instalar baterías de litio que mejorarán el suministro de energía de la nave.
Formación académica de Christina Koch
Christina Koch nació el 2 de febrero de 1979, en Michigan, pero ella se considera de Jacksonville, Carolina del Norte.
Cuando recién tenía 18 años, se graduó en la Facultad de Ciencias y Matemáticas de Carolina del Norte, en Durham.
Posteriormente, se matriculó en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, en Raleigh.
Fundada en 1887, esta universidad es ahora la universidad más grande de Carolina del Norte. Si bien es una universidad con 102 áreas de estudio de pre-grado, se especializa en la agricultura, diseño, ingeniería y textiles.
En esta universidad, Christina obtuvo dos licenciaturas: “Ciencias en Ingeniería Eléctrica” en 2001; y “Física” en 2002. A continuación cursó un Máster en Ingeniería Eléctrica.
Experiencia laboral de Christina Koch
Christina Koch trabajó como ingeniera eléctrica en el “Laboratorio de Astrofísica de Alta Energía” de la NASA, en el Centro Espacial Goddard.
En este Centro de Vuelos Espaciales, contribuyó al diseño y construcción de instrumentos científicos para varias misiones de la NASA.
Dichos trabajos le dieron experiencia tanto en el desarrollo de instrumentos de ciencia espacial como en la ingeniería de campo, para estudios de cosmología y astrofísica.
Durante un tiempo, también se desempeñó como facultativa adjunta en el Montgomery College, donde dirigió un curso de Laboratorio de Física.
Trabajos realizados por Christina Koch en la Antártida
Desde 2004 hasta 2007, Christina Koch estuvo como investigadora asociada en el “Programa Antártico de los Estados Unidos”.
Completó una temporada de invierno en la Estación Amundsen-Scott.
La Estación Amundsen-Scott es una estación de los Estados Unidos que se encuentra prácticamente en el polo sur geográfico. Está habitada de manera permanente. Su nombre honra a Ronald Amundsen y a Robert Scott, los primeros que alcanzaron el polo sur en 1911 y 1912, respectivamente.
Mientras estuvo en la Antártida, Christina Koch fue miembro de los equipos de lucha contra incendios y de los equipos de búsqueda y rescate.
En 2010, regresó al trabajo científico de campo en zonas remotas, con giras que incluían la Estación Palmer en la Antártida, la única Estación antártica permanente de Estados Unidos al norte del círculo polar antártico. Aunque está en una isla, el hielo frecuentemente la conecta con tierra firme.
Christina Koch en el desarrollo de instrumentos espaciales
De 2007 a 2009, Christina Koch volvió de nuevo a trabajar en el desarrollo de instrumentos de ciencia espacial. Lo hizo como ingeniera eléctrica en el “Departamento Espacial del Laboratorio de Física Aplicada” de la Universidad Johns Hopkins.
Estos instrumentos están destinados a estudiar las partículas de radiación durante las misiones de la NASA.
Trabajos de Christina Koch en estaciones científicas remotas
Christina Koch también participó en las investigaciones llevadas a cabo en el Parque Nacional Glacier en el Estado americano de Montana.
El glaciar está situado en la división continental del lado oeste y tiene una elevación promedio de 2.600 metros sobre el nivel del mar.
Christina Koch estuvo varias temporadas de invierno en la Estación Summit en Groenlandia. Se trata de una Estación de investigación en donde se desarrollan proyectos de meteorología, glaciología, química atmosférica y astrofísica.
La población de la Estación es de 5 habitantes en el invierno y 55 personas en el verano. Esto da una idea de las condiciones climatológicas del entorno.
En el año 2012, Christina Koch se desempeñó como Ingeniera en el Observatorio de Monitoreo Global en Barrow, Alaska, contratada por la “Administración Nacional Oceánica y Atmosférica” (NOAA).
NOAA es una agencia científica del Departamento de Comercio de los Estados Unidos cuyas actividades se centran en las condiciones de los océanos y de la atmósfera.
Esta Agencia publica advertencias sobre condiciones meteorológicas peligrosas, prepara cartas de mares y de cielos, guía sobre el uso y la protección de los recursos oceánicos y costeros, y conduce estudios para mejorar el entendimiento y la administración del ambiente.
Poco tiempo después, Christina Koch fue destinada como Jefa de Estación al Observatorio de Samoa Americana, una isla situada en el océano Pacífico, al este de Australia
Christina Koch seleccionada como astronauta por la NASA
La NASA realizó durante un año y medio, una extensa búsqueda de potenciales astronautas que ayudarán a la Agencia a superar los límites de la exploración y a viajar a nuevos destinos en el sistema solar.
Finalmente, en el año 2013, fueron ocho los candidatos seleccionados para ser los nuevos aprendices de astronautas de la NASA en un equipo denominado Grupo 21.
De los ocho estudiantes de dicha promoción, escogidos entre más de 6.000 aspirantes, cuatro eran mujeres. Entre ellas estaban Christina Koch y Jessica Meir. Ambas han entrenado juntas durante los últimos seis años.
Este grupo recibió entrenamiento fisiológico, de supervivencia, clases de vuelo y varias sesiones informativas. Se han preparado para realizar misiones en órbita terrestre baja, en un asteroide y en Marte.
La capacitación de Christina Koch como candidata a astronauta incluyó informes científicos y técnicos, instrucción intensiva en sistemas de la Estación Espacial Internacional, caminatas espaciales, robótica, entrenamiento fisiológico, entrenamiento de vuelo y entrenamiento de supervivencia en el agua y el desierto.
Caminatas espaciales anteriores a la de Christina Koch
En el año 1963, en plena carrera espacial, la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova fue la primera mujer que viajó al espacio.
Valentina Tereshkova voló en solitario a bordo de la cápsula Vostok 6, en el marco del programa espacial soviético que había inaugurado Yuri Gagarin.
La segunda mujer que realizó la hazaña de viajar al espacio fue también rusa: Svetlana Savitskaya (en 1982).
Dos años después, en 1984, esta valiente astronauta llevó a cabo una caminata espacial junto a Vladímir Dzhanibekov.
La astronauta estadounidense Sally Ride también hizo una caminata espacial, un año después.
La Expedición 61 a la Estación Espacial Internacional
Desde que, en el año 2009, se empezó a construir la Estación Espacial Internacional (ISS), ha sido necesario ir cambiando periódicamente a los astronautas que trabajan en ella. Cada grupo nuevo que viaja a la ISS se denomina Expedición.
Desde que se puso en marcha la Estación Espacial Internacional (ISS), el 20 de noviembre de 1998, se han realizado más de 200 caminatas espaciales.
Son 15 las mujeres que han participado en estas caminatas. En estos casos, siempre han ido juntos un hombre y una mujer.
La Expedición 61 comenzó el 3 de octubre de 2019, cuando la nave rusa Soyuz MS-12, lanzada el 25 de septiembre de 2019, llegó a la Estación Espacial Internacional.
Parmitano estuvo acompañado por Aleksandr Skvortsov, Andrew Morgan, Christina Koch, Oleg Skripochka y Jessica Meir.
Jessica Meir y Christina Koch hicieron historia cuando, el 18 de octubre de 2019, realizaron juntas su primera caminata espacial, mientras llevaban a cabo una serie de reparaciones.
El viernes 18 de octubre de 2019 se realizó en la Estación Espacial Internacional (ISS) el primer paseo espacial protagonizado sólo por dos mujeres.
A las 14:00 del mediodía (hora en España), Christina Koch y Jessica Meir salieron al exterior de la Estación.
Mientras las mujeres salían al exterior de la ISS, los cuatro hombres les daban apoyo desde el interior de la Estación.
La caminata espacial se prolongó durante siete horas y diecisiete minutos. Tras unos momentos de adaptación para moverse por el vacío del espacio, las astronautas prepararon las herramientas para comenzar las labores de reparación.
Reemplazaron una unidad de carga y descarga de las baterías que colectan energía de los paneles solares en la viga de babor de la Estación.
La ISS viaja por el espacio a una velocidad de 27.000 kilómetros por hora, en una órbita que está a unos 485 kilómetros de la Tierra.
La temperatura exterior es inferior a 260º C bajo cero. El vacío es casi absoluto. La exposición a la radiación solar y a los rayos cósmicos, es brutal. Siempre existe el peligro del impacto con partículas espaciales. En resumen, es algo extremadamente peligroso. NO se trata de un “paseo”.
Los trajes que utilizaron son conocidos como “Unidades de Movilidad Extra vehicular”; pesan entre 135 y 225 kg. Proporcionan: aire y temperatura controlados, energía, instrumentos de comunicaciones y protección de la radiación y las partículas espaciales.
Christina Koch regresó a la Tierra el 6 de febrero de 2020, aterrizó en Kazajistán tras una estadía récord de 328 días en la Estación Espacial Internacional.
Lo primero que hizo fue disfrutar de lo habitual en su casa, comer sus comidas favoritas, hacer un viaje familiar a la playa y jugar con su perro.
En una entrevista, Christina Koch dijo: “Después de 328 días en el espacio, los primeros seis días en la Tierra estuvieron llenos de mucha maravilla y emoción. Todos vivimos en un planeta maravilloso y es genial estar de regreso”.
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